Fue uno de los médicos españoles más importantes de la historia, especializado en endocrinología, la rama de la medicina que se ocupa del estudio del sistema endocrino humano y de todas aquellas afecciones (diabetes, hipertiroidismo, hipotiroidismo) que le impiden un correcto funcionamiento.
Además de en la medicina dejó su huella imborrable en la cultura y la política de su época ya que como integrante de la generación intelectual de 1914 participó e influyó con sus ideas en aquellos tiempos políticos y sociales bastante convulsionados
Sostuvo y defendió la ideología liberal contra el fascismo naciente y fue un férreo detractor del comunismo y de la dictadura liderada por Primo Rivera.
Su inclinación literaria tan apreciada, su pensamiento humanista, y su compromiso político con los temas de su tiempo lo erigieron en un referente político y social
Nació y murió en Madrid, en 1887 y 1960, respectivamente.
Fue hijo del destacado jurista Manuel Marañón.
Por su posición política apoyó el proceso político conocido como Segunda República, que se extendió entre 1931, cuando se desplazó a la monarquía de Alfonso XIII, y 1939 año de finalización de la Guerra Civil y la instalación del dictador Francisco Franco en el poder
Si bien entre 1936 y 1942 se marchó al exilio, cuando regresó fue respetado por la dictadura quien lo consideró un hombre de ciencia y letras muy influyente.
Escribió muchos trabajos médicos pero también le gustó hacerlo sobre otros temas más terrenales como viajes, indumentaria, cocina, entre otros
En 1931, coincidiendo con su apoyo a la Segunda República, creó junto a José Ortega y Gasset y Ramón Pérez Ayala, la Agrupación al Servicio de la República (ASR)
La motivación del grupo no era hacer política activa sino usar el movimiento como punto de unión y debate de intelectuales, políticos, y cualquier otro profesional interesado en la construcción de un estado nuevo y libre.
La ASR promovió la división de poderes, la división del estado en provincias gobernadas por asambleas y autoridades locales, y un estado laico, entre otras reformas
Fue diputado de las Cortes por la provincia de Zamora, entre 1931 y 1933
En 1988 a 28 años de su fallecimiento se formó la Fundación Gregorio Marañón cuyo fin fue dar a conocer su pensamiento y obra y además fomentar la investigación médica.
Ha recibido muchos homenajes y distinciones en su vida: integró y colaboró con las Academias de Ciencias más importantes de su país, y el Hospital Público Universitario Gregorio Marañón, cito en Madrid, lleva como homenaje su nombre
Es un hospital referente en el mundo y en España a razón de la calidad de sus profesionales y por sus labores médicas, docentes y de investigación.
También destaca por la presencia de equipamiento médico de última tecnología.